Todavía hay muchas preguntas sin respuesta acerca de la noche del viernes pasado mes de septiembre, cuando al menos 43 estudiantes desaparecieron después de ser atacados en la ciudad mexicana de Iguala. Uno de los más básicos es, ¿Por qué?
Según el testimonio de que el gobierno mexicano no ha lanzado oficialmente, sicarios del cártel ahora detenidos pueden tener la respuesta: Ellos creían que una banda rival se mezcló con los estudiantes y estaba tratando de entrar en su territorio. Y además, parece al menos 13 personas más fueron secuestrados y ejecutados esa noche en un rancho de ladera en el barrio de Pueblo Viejo, a unos 18 kilómetros del vertedero de basura donde las autoridades federales dicen que los estudiantes de la Ayotzinapa profesores universitarios fueron asesinados e incinerados .
"Disparé dos de ellos en la cabeza", uno de los presuntos asesinos dijeron autoridades del grupo de 13 hombres jóvenes. Esa declaración y otros entregados a las autoridades por varios de los presuntos asesinos fueron contenidos en más de 2.000 páginas de un expediente gobierno. Esas páginas, obtenidos por VICE Noticias, comprenden sólo dos de los 82 volúmenes en el archivo; funcionarios describen los 26 de septiembre desapariciones y asesinatos como uno de los "mayores casos en la memoria."
Fosas Comunes Dot laderas alrededor Iguala Como Buscar Los estudiantes que faltan continúa. Lea más aquí.
Las confesiones indican que los participantes en los ataques caóticos - incluyendo ambos miembros del cartel de la droga Guerreros Unidos y policías locales - cree que los miembros de la banda rival de Los Rojos cabalgaban entre los estudiantes que viajaron a través de Iguala de la noche.
Tanto Los Rojos y Guerreros Unidos son grupos disidentes que surgieron de la fractura violenta de la antes dominante Beltrán Leyva cártel en el estado de Guerrero. Después de la separación comenzó en 2009, las cifras oficiales muestran homicidios y secuestros tanto aumentó dramáticamente en el estado - y observadores de derechos humanos dicen que las peleas entre las pandillas en astilla en realidad dio lugar incluso un mayor número de víctimas. Decenas de tumbas clandestinas se han descubierto en las laderas sobre Iguala ya desaparecieron los estudiantes de Ayotzinapa, a consecuencia de la guerra contra el narcotráfico en Guerrero.
No está claro por qué las autoridades han restado importancia a la ejecución de los 13 hombres adicionales en Pueblo Viejo, pero las presiones políticas pueden haber tenido un papel. La simpatía por los estudiantes que faltan se hinchó en medio de manifestaciones en todo México y en otras partes del mundo a finales del año pasado, y las protestas encabezada por sobrevivir a los estudiantes y padres de familia de los desaparecidos a veces se tornó violenta . Pudo haber sido considerado políticamente prudente para que el gobierno sugieren que los estudiantes estaban vinculados con el mundo del hampa como sugirieron algunos sospechosos en sus declaraciones a las autoridades.
Pero desde el principio, ya que la magnitud del caso se hizo evidente , el grupo de víctimas que murieron en Pueblo Viejo no eran completamente ignorado por los funcionarios.
Iñaki Blanco, el fiscal del estado de Guerrero que estaba a cargo de la investigación inicial antes de la participación del gobierno federal en el caso, dijo en una conferencia de prensa 05 de octubre que un grupo de hombres jóvenes que el cártel cree que los estudiantes fueron "transferidos a un área de lo alto de las colinas de Pueblo Viejo, donde [el cártel] mantener fosas clandestinas, donde fueron asesinados. "
Blanco dijo que esta orden vino de un hombre conocido como El Choky, un líder local del Guerreros Unidos.
El mismo día que Blanco mencionó el incidente Pueblo Viejo, la investigación estatal fue trasladado al fiscal federal Jesús Murillo Karam. Rara vez se ha mencionado públicamente Pueblo Viejo, ya que, aunque en una conferencia de prensa 07 de noviembre sí dijo, "Los restos que fueron descubiertas en esas primeras tumbas, los de Pueblo Viejo, no pertenecen a los jóvenes estudiantes."
Las autoridades federales no respondieron a las numerosas solicitudes de comentarios de VICE News.
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No hay ninguna prueba definitiva de que "infiltrados" de Los Rojos estaban a bordo de los autobuses que llevan a los estudiantes. Estudiantes niegan cualquier conexión con Los Rojos; se hizo saber VICE News que habían sido atacados por el cartel en el pasado.
"Siempre hemos dicho que - no tenemos y nunca he tenido nada que ver con los narcos", Omar García, uno de los líderes estudiantiles de Ayotzinapa, dijo VICE News.
El caso se ha prolongado durante más de 115 días . Los manifestantes y los familiares de los desaparecidos han dudado de la versión del gobierno desde el día que se hizo público. Forenses investigadores independientes de Argentina, que estudiaron el caso también lo cuestionaron.
En el interior del Colegio Mexicano Donde 43 estudiantes se desvanecieron después de los ataques de la policía.
Según el fiscal federal, los 43 estudiantes desaparecidos fueron probablemente masacrados por al menos tres hombres que supuestamente confesaron el crimen. Los cuerpos de los estudiantes fueron incinerados en un vertedero en Cocula, una comunidad vecina a Iguala, Murillo Karam dijo que los asesinos dijeron a los investigadores.
Al parecer los hombres dijeron que mataron a los estudiantes, apilados los cuerpos, quemados, y luego molidos y empaquetados cenizas de las víctimas. Los restos fueron arrojados al río San Juan, cerca del vertedero. Pero el gobierno también dijo que los estudiantes permanecieron técnicamente "desaparecidos", debido a que las cenizas y fragmentos de hueso encontrados en el río sería casi imposible identificar positivamente.
Las confesiones grabadas en vídeo se harán públicos durante 07 de noviembre la conferencia de prensa de la Procuraduría General. En ese momento, el gobierno no dio a conocer al público que algunos miembros de Guerreros Unidos dijo que los ataques fueron coordinados debido a un temor de que Los Rojos estaban tratando de entrar en la ciudad.
El número real de personas que fueron asesinadas o secuestradas la noche sigue siendo desconocido. Murillo Karam mismo ha evitado especificar un número exacto de víctimas, diciendo que los funcionarios pueden " nunca se sabe "cuántos cuerpos fueron incinerados en Cocula. Casting más dudas sobre la versión del gobierno de eventos son las numerosas denuncias de abusos presentadas contra las fuerzas de seguridad mexicanas en los últimos años para obtener confesiones forzadas y la tortura de personas sospechosas de crímenes .
Según declaraciones de los sobrevivientes del ataque, en la tarde del 26 de septiembre, dos autobuses comerciales cada uno con unos 45 jóvenes dejaron el Isidro Burgos Escuela Normal Raúl en Ayotzinapa, ubicada en el centro de Guerrero.
El campus de Ayotzinapa pertenece a una red de institutos de formación docente políticamente radicales destinadas a servir a las regiones rurales de México. La escuela Ayotzinapa tiene un historial de enfrentamientos con el gobierno; en 2011, un encuentro con las fuerzas del Estado dejó dos estudiantes muertos a lo largo de la carretera federal Autopista del Sol en Guerrero.
Los locales en Guerrero a menudo se refieren a sus estudiantes como normalistas o, a veces despectivamente, como Ayotzinapos . En diciembre, los líderes estudiantiles en la escuela dijeron VICE Noticias que los guerrilleros habían estado "presente" en el campus durante al menos un año.
'El Choky y sus sicarios les bloquean, y luego los hizo salir de los autobuses. Uno de los estudiantes se resistieron, y fue entonces cuando se produjo el tiroteo. "
Los estudiantes habían secuestrado los dos buses de la semana anterior en lo que se ha convertido en una práctica común en una escuela . En la noche de los ataques, dicen los estudiantes, sólo de primer y segundo año los estudiantes de Ayotzinapa salieron del campus a bordo de los autobuses. Los estudiantes dijeron VICE News que tenían la intención de requisar finalmente 20 autobuses en total que serían utilizados para transportarlos y estudiantes de otras partes de México a la marcha anual que conmemora la masacre de estudiantes octubre 1968 en la plaza de Tlatelolco en la Ciudad de México .
El día 26, los dos autobuses que dejaron la escuela todos se detuvieron en un punto diferente a las afueras de Iguala. El plan era esperar a que otros autobuses de pasajeros y bloquear la carretera con el fin de apropiarse de ellos.
"Media hora después de que el primer autobús se detuvo en [el desvío carretera de la ciudad de] Huitzuco, pasa un autobús, con 10 pasajeros a bordo, que los [estudiantes] detienen, e informan al conductor de su intención de secuestrarlo" dijo Vidulfo Rosales, un abogado de derechos humanos que representa a los padres de los estudiantes desaparecidos.
Según testimonios recogidos por Rosales, el conductor se comprometió a entregar el control del autobús, pero sólo después de que él entregó a sus pasajeros a la terminal de autobuses de Iguala. Así que ocho estudiantes de Ayotzinapa subieron al autobús.Cuando llegó a la terminal, los pasajeros se bajaron, al igual que el conductor - que luego cerró la puerta del vehículo detrás de él, atrapando a los ocho estudiantes dentro.
El conductor alertó a sus superiores, y los estudiantes dentro del autobús llamó a sus compañeros de clase en los cortes de ruta, que se dirigían a la terminal de autobuses.Cuando llegaron, se rompieron las ventanas del autobús y liberaron a sus ocho compañeros. Entonces, viendo una oportunidad, secuestraron tres autobuses más desde la terminal. Los estudiantes ahora tenían cinco autobuses en total.
Guerrillas en Ayotzinapa: El Legado de los Movimientos Armados presentes en las protestas mexicanas.
Estudiantes sobrevivientes dicen que no tenían intención de interrumpir un discurso que se da por la esposa del alcalde de Iguala, como la cuenta inicial del gobierno sugirió. En su lugar, que estaban buscando para salir de la ciudad lo más rápido posible. Según los supervivientes, los autobuses se separaron. Dos dirigieron al sur, mientras que otros tres autobuses, tal vez por error, se dirigieron hacia el centro de la ciudad.
Sin el conocimiento de los estudiantes, dos grupos de sicarios del cártel Guerreros Unidos estaban viendo todo esto se desarrollan.
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El cártel mantiene una red de espías callejeros conocidos como halcones ["halcones"] que supervisaron casi todo en Iguala. El primer grupo de halcones que miran los estudiantes ese día fueron dirigidos por el hombre apodado El Choky, quien aún no ha sido capturado y cuyo verdadero nombre es aún desconocido. Los testigos dijeron que él es menos de 5 pies de alto y calvo. El segundo equipo incluyó a un hombre llamado Martin Alejandro Macedo, quien se unió a la organización criminal a principios de 2014. Esa noche, Macedo conducía una camioneta Dodge Ram blanco.
Dos hombres Macedo identificó más tarde en su testimonio sólo como lo acompañaron El Tiner y El Topo. Él también fue acompañado por Marco Antonio Ríos Berber, alias El Amarguras, quien dijo a las autoridades que recibió 7.000 pesos (menos de 500 dólares) al mes para trabajar como un halcon para el cártel.
Cuando la oscuridad descendió y la caravana de tres autobuses pasó la plaza central de Iguala, un coche de policía bloqueó su camino. Los estudiantes del primer autobús se bajaron y comenzaron a tirar piedras en la dirección de la policía. Los oficiales dispararon balas en el aire.
Miembros Guerreros de Unidos que habían estado siguiendo a los estudiantes desde que salieron de la terminal de autobuses dijeron a las autoridades que las personas que descienden de los autobuses llevaban máscaras. En sus declaraciones, también dijeron-minivan como Nissan Urvans se mezclaron con los autobuses - y que los hombres armados salieron de los vehículos.
Alrededor de ese tiempo, el jefe de la agencia local de bienestar social, María de los Ángeles Pineda - la esposa del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca - acababa de dar un informe público en la Plaza Cívica. Conocido como un report , el evento se utiliza habitualmente como una plataforma para reunir apoyo para futuras ambiciones políticas de un mandatario.
En su declaración, Ríos Berber no parece hacer una clara distinción entre los pasajeros de los autobuses y los caballo en las Urvans, diciendo simplemente: "Ellos estaban armados." Las autoridades no han identificado estos hombres armados supuestos en los furgones.
Macedo dijo que este era el momento en que recibió órdenes de El Choky.
"Estos sujetos eran muy violentos", Macedo dijo a las autoridades. "Ellos estaban tirando piedras grandes y habían armas cortas, como .9mm y .38s .... Me recibió la orden de disparar contra ellos, ordenada por El Choky".
Nadie murió durante este encuentro. Pero los ataques habían comenzado.
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En medio de los disparos, los estudiantes que habían descendido de los autobuses volvieron a ellos. El coche de la policía que estaba bloqueando su camino se movió, los estudiantes dijeron, y los tres autobuses avanzó hacia el norte por Juan N. Álvarez, la avenida principal que atraviesa el centro.
A pocas cuadras de distancia, sin embargo, más coches patrulla de la policía local de Iguala, una vez más les bloquearon el camino, esta vez en colaboración con miembros del cártel Guerreros Unidos. Los estudiantes estaban atrapados.
Un miembro del cártel dijo a los funcionarios que El Choky y sus cómplices atacaron de nuevo los vehículos porque "había personas armadas de Los Rojos en el grupo de los que esperaban para sorprendernos."
"El Choky y sus sicarios les bloquean, y luego los hizo salir de los autobuses", dijo el miembro del cártel, Ramiro Ocampo Pineda. "Uno de los estudiantes se resistieron, y fue entonces cuando se produjo el tiroteo."
Según el testimonio, El Choky metió en su gris Ford Mustang con sus sicarios y tomó la carretera hacia Chilpancingo para interceptar a los otros dos autobuses que también estaban tratando de salir de Iguala; Macedo y sus hombres permanecieron, disparando a los estudiantes. Un grupo de 17 personas que pensaba eran estudiantes fueron tomados de los autobuses, se carga en camiones, y más tarde trasladado a una casa de seguridad ubicada en Loma de los Coyotes, un barrio al oeste de Iguala, que sirve como una plaza fuerte para el Guerreros Unidos. El barrio disfrutó de la plena protección del departamento de policía de Iguala, que aún mantiene un control de seguridad en la entrada del barrio.
En Fotos: La Escuela Normal de Ayotzinapa, Antes y Después del Desapariciones Estudiante. Lea más aquí.
"Los matamos inmediatamente, ya que no quieren someterse, y puesto que no había más de ellos que nosotros", dijo Macedo autoridades. "El Choky dio la orden para nosotros estar sobre ella. Algunos de ellos fueron asesinados estilo ejecución, y otros fueron golpeados, ya que se convirtió en violenta una vez que fueron secuestrados, y por lo que dejarían de puta quejarse, hemos decidido matarlos."
Además de este primer grupo de 17 víctimas, junto a otros 30 pasajeros de un autobús en Juan N. Álvarez fueron cargados en los coches patrulla de la policía de Iguala y llevado a la comisaría municipal. Posteriormente fueron entregados al Guerreros Unidos y llevados a Loma de los Coyotes, dichos estados.
La policía Cocula se involucró después de recibir una solicitud de copia de seguridad ya sea de la policía de Iguala o el Guerreros Unidos. En conjunto, las fuerzas policiales entregados los aproximadamente 30 pasajeros - separados en cuatro vehículos, cada uno con seis a ocho de los detenidos - que habían estado en la comisaría.
Los estudiantes de Ayotzinapa que todavía estaban en Juan N. Alvarez comenzaron a pedir ayuda. Incluso tenían tiempo para llamar a los miembros de la prensa local a la escena, que, sobre las 11, fueron testigos de otro ataque. Dos estudiantes fueron asesinados a balazos: Daniel Solís Gallardo y Julio César Rodríguez Nava.
Cerca de allí, el cadáver de Julio César Mondragón, un estudiante de Ayotzinapa 22 años de edad, fue encontrado la mañana siguiente . La piel había sido retirado de su rostro y sus ojos había sido arrancada. Todavía llevaba la camisa roja de la escuela y la bufanda marrón.
Mientras tanto, El Choky y sus hombres todavía estaban tratando de llegar a las otras dos autobuses que pensaban que llevaban infiltrados. Cerca de desvío de la carretera Chilpancingo hacia un pueblo llamado Santa Teresa, cerca de nueve kilómetros de Iguala, que interceptaron un autobús. Los hombres de El Choky entonces supuestamente comenzaron a disparar. Pero el autobús no llevaba estudiantes o infiltrados - en su lugar, que estaba cargada con jóvenes jugadores de fútbol de las Avispas, un equipo de tercera división que regresaban de un partido que tenían esa noche en Iguala contra las Iguanas, el equipo local.
Tres personas murieron: un jugador de 15 años de edad, una mujer en un taxi, y el conductor del autobús.
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El Choky y sus hombres se dirigieron de nuevo hacia Iguala. En la carretera, en frente de un nuevo palacio de justicia del estado, la policía de Iguala arrinconaron uno de los dos autobuses que transportaban Ayotzinapa estudiantes que encabezaron originalmente al sur de la estación de autobuses; el segundo autobús se detuvo también no muy lejos debajo de un puente.
El testimonio en el expediente no especifica si El Choky estuvo involucrado en el ataque a los pasajeros en los autobuses. Pero nuevos testimonios de los estudiantes sobrevivientes entregados a su abogado indica que los pasajeros en al menos uno de ellos fueron secuestrados. Es probable que el grupo de 13 personas después que murieron en Pueblo Viejo se encontraban entre ellos. Este encuentro ha sido en su mayoría ausentes de la cuenta de los ataques del gobierno, que plantea interrogantes sobre quién era quién, y si hay más de 43 víctimas fueron desaparecidas esa noche.
Este grupo separado de 13 víctimas fueron llevados a Pueblo Viejo, un barrio en la periferia norte de Iguala, donde El Gil, el supuesto jefe criminal de la Iguala "plaza", o hub, tiene propiedad.
Ver el documental VICE Noticias en Ayotzinapa, 'The Missing 43.'
Ríos Berber dijo que El Choky y cinco de sus hombres mataron a tres "Ayotzinapos" en Pueblo Viejo "por causar problemas." Ríos Berber dijo que había recogido la gasolina que se utiliza para quemar los cuerpos. Otro hombre conocido como El Chaki, la mano derecha de El Choky, se le ordenó cavar una tumba. Más tarde, un hombre identificado sólo como El Gaby presuntamente vertió combustible en los cuerpos y les prendieron fuego.
La policía de Iguala, que se había detenido a pasajeros de al menos uno de los autobuses en frente del palacio de justicia, transportado a otro grupo de 10 personas a la entrada de Pueblo Viejo, según el testimonio.
A las 11:21 de la tarde, las cámaras de vigilancia de la ciudad registraron varias unidades de patrulla en Iguala de conducción en una carretera al norte de la ciudad con la población civil visibles en las camas de recogida. Se dirigían hacia la misma gasolinera donde Ríos Berber dijo que compró la gasolina.
De acuerdo con las confesiones, la policía luego entregó a estas víctimas a El Choky.
Con las jarras ahora completos, Ríos Berber se dirigió de nuevo hasta Pueblo Viejo.Otro miembro del cártel, dijo que fue testigo de 10 detenidos en las camionetas de la policía, que los presuntos asesinos confesaron que ellos creían eran Ayotzinapa estudiantes.
"Sacaron el 10 de ellos, y en ese momento El Choky nos ordenaron matar a ellos", dijo Ríos bereber. "Disparé dos de ellos en la cabeza con la pistola de La Mente. El Gaby mató a otro dos, El Choky asesinados uno, La Vero otro mataron, y nos fuimos cuatro de ellos con vida."
El Gaby presuntamente vertió diesel en los seis cuerpos y les prendieron fuego. Y luego, con la ayuda de El Chaki, cubrieron el hoyo con ramas. Los cuatro que sobrevivieron fueron golpeados inconsciente.
Los cuatro, según las confesiones, fueron posteriormente asesinados, aunque no estaba claro si fueron muertos esa noche o en los días siguientes.
El asesinato de este grupo de 13 personas en Pueblo Viejo complica la versión oficial dada por la oficina del fiscal general, que sostiene que más o menos 40 personas fueron quemadas en el vertedero de Cocula. Indica que varios no estudiantes también fueron secuestrados y asesinados en la confusión de los ataques. Pero, por ahora, es imposible saber si las otras víctimas eran civiles, guerrilleros, o miembros de pandillas inocentes como algunos de los detenidos alegan.
Murillo Karam no respondió a los pedidos de una entrevista.
La investigación de su oficina se ha traducido hasta ahora en más de 16 allanamientos.Hay más de 97 sospechosos en custodia "para diversos grados de responsabilidad" en el caso. Otro presunto sicario vinculado a la desaparición de los estudiantes fue detenido fuera de Cuernavaca la semana pasada.
Se han emitido un total de 221 órdenes de aprehensión, y 385 individuos han sido cuestionados, incluyendo 36 miembros de las fuerzas armadas, dijo Tomas Zeron, jefe de investigaciones criminales de la Procuraduría General, en una conferencia de prensala semana pasada.
"Todas las líneas de investigación se han agotado", dijo Zeron.
'Los estudiantes Desaparecidos de México. " Ver la primera VICE despacho informativo aquí.
Sólo un alumno que falta se ha identificado positivamente entre los restos del gobierno dijo que se reunieron desde el incidente de Cocula. El equipo de forenses argentinos, sin embargo, dijo que no podía confirmar que el fragmento de hueso que pertenece a 19 años de edad, Alexander Mora se encuentra realmente en el vertedero de Cocula.
A partir del martes, los estudios sobre los otros restos encontrados en el basurero Cocula son, hasta ahora inconcluso . El caso, los funcionarios dicen, sigue abierta.
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